Elige bien las
personas de
quienes te rodeas
Un rey que tomó decisiones equivocadas y sus influencias lo alejaron de Dios
15 Octubre, 2024
Por Esteban
Contexto
En 2 Crónicas 21, Joram toma el lugar de su papá Josafat como rey de Judá (v.1).
Al establecerse como rey, Joram mató a sus seis hermanos y a otros líderes (vv. 2 – 4).
Joram fue igual de perverso que Acab, hizo lo malo a los ojos del Señor. Además indujo al pueblo a apartarse de Dios y seguir dioses falsos (vv. 6, 11)
Primera persona que influyó en Joram: su padre
Me resulta muy interesante quienes influyeron en la vida de Joram.
El primero que veo es a su padre. Curiosamente a primera vista, en el capítulo 21, pareciera que su papá Josafat fue una buena influencia:
- Les dio regalos materiales costosos y tierras a todos sus hijos
- El profeta Elías le dice a Joram: “Tú no has seguido el buen ejemplo de tu padre“
Pero leyendo el capítulo 20 nos damos cuenta de algunos detalles sobre su padre Josafat que definitivamente influyeron en la vida de Joram y sus decisiones:
- 2 Crónicas 20:32 dice que Josafat fue un buen rey y siguió el buen ejemplo de su padre Asa (abuelo de Joram)
- Pero el versículo 33 dice que no quitó todos los santuarios a dioses falsos
- El mismo versículo dice que la gente no se comprometió a seguir a Dios por completo (esto bajo el gobierno e influencia de Josafat como rey)
- El versículo 35 dice que Josafat hizo una alianza de negocios con Ocozías, un rey perverso
Así que su papá, aunque fue “buen rey”, siguió a medias a Dios, mientras aún adoraba a otros dioses (o al menos siendo pasivo en cuanto a permitir que el pueblo de Dios adorara dioses falsos).
Su papá no hizo lo suficiente para que las personas a su cargo se comprometieran a Dios por completo.
Y además, su papá decidió establecer relaciones importantes con personas equivocadas, quienes obviamente lo iban a alejar de Dios.
Todo esto Joram, como hijo, lo vio y lo aprendió. Uno como hijo fácilmente dice: “si mi papá lo hace, yo también puedo”, “no tiene nada de malo, porque mi papá lo hace”. Y claro, uno toma sus propias decisiones, pero la influencia de los padres es muy importante.
En este punto concluyo dos cosas: una, como padre debo ser consciente de la influencia que estoy siendo para mis hijos; de cómo mis decisiones van a afectar su futuro, su percepción del mundo, su compromiso con Dios, y ultimadamente sus decisiones.
Y dos, aunque mis padres o personas que influyen en mi vida se equivoquen, yo puedo optar por retener lo bueno y desechar lo malo (1 Tesalonicenses 5:21).
Segunda persona que influyó en Joram: su esposa
En el versículo 6 dice que Joram fue tan perverso como Acab, y añade “porque se había casado con una de las hijas de Acab“
Tú sabes muy bien lo que dice 2 Corintios 6:14 “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos“. Y en el antiguo testamento Dios había dejado bien claro eso para su pueblo.
Al hacer esto Joram estaba permitiendo que la mayor influencia de su vida, la esposa, fuera una mujer perversa, alejada completamente de Dios. Toda la cultura, y creencias, y perversión que había en la familia de Acab, se convirtieron en una poderosa influencia para Joram.
La esposa, con su mentalidad perversa, iba a influir en sus decisiones como rey y como hombre.
Mis conclusiones de este punto son: uno, si eres soltero, pide discernimiento a Dios al decidir con quién te vas a casar, pues ella y toda su familia van a ser influencia para ti y tus hijos.
Dos, seas casado o soltero, tú sé una buena influencia. Es decir, ¿eres tú el Acab con quien otros deberían evitar casarse? ¿Eres la persona que va a alejar a alguien más de Dios? ¿O serás una buena influencia y acercarás a tu cónyuge más a Dios y a vivir una vida santa?
Tres, muy seguramente hay alguien que ya está casado y pueda decir: “yo estoy casado con un Acab, me está influyendo para mal, alejándome de Dios”. Y, aunque cada caso es único y complejo, pero Dios puede restaurar cualquier corazón y cualquier matrimonio, así que haz tu parte buscando a Dios en oración, escudriñando la Palabra, en ayuno; y pon a tu cónyuge en manos de Dios; se luz en su vida y buena influencia para que él o ella sean transformados.
Conclusiones
Uno de mis libros favoritos, “Enseñando para cambiar vidas”, dejo esta cita plasmada en mi mente y corazón: “tu futuro depende de los libros que leas y de las personas de las que te rodees“.
Como cristianos no vamos a rechazar a nadie, no vamos a hacer acepción de personas (Hechos 10:34), Cristo mismo puso el ejemplo sentándose a comer y pasando tiempo con toda clase de personas.
Pero lo que es cierto es que no podemos permitirnos ser influenciados por personas que nos van a alejar de Dios. Es muy diferente ser abiertos o respetuosos o sociales con las personas, a hacer relaciones íntimas con ellas.
Debemos ser cuidadosos con quién nos relacionamos íntimamente, a quién escuchamos, quién permitimos que llenen nuestras mentes y corazones, porque eventualmente tomaremos algo de ellos.
De hecho Jeremías 15:19 dice: “Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos“.
Así que al contrario, nosotros debemos ser sal de la tierra y luz del mundo; que la luz de Cristo en nosotros brille de tal forma que las tinieblas en las vidas de otros sean disipadas y puedan venir a los pies de Cristo.
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